La Plata, Ciudad Generosa

La construcción desmedida que se ha impulsado desde el Ejecutivo municipal en los últimos años, sumado a la falta de inversión que han realizado las empresas prestadoras del servicio de energía eléctrica y agua corriente, mantienen en vilo a los vecinos, que padecen diariamente los cortes en los servicios. No tener agua o luz se ha convertido en un hecho cotidiano para los miles de platenses que a diario deben ver alteradas sus vidas por la ausencia de inversión en mantenimiento y ampliación de servicios de las empresas Edelap y ABSA, quienes durante años no han realizando obras de envergadura pese a los anuncios.
Esta falta total de inversiones que son requeridas en la región para mantener correctamente el consumo de servicios, se suma a la absoluta libertad de acción que recibieron las grandes empresas de construcción que han realizado torres en prácticamente todas las zonas del casco urbano de la ciudad, generando conglomerados multifamiliares en zonas en donde no estaba preparada la calidad de servicios básicos para recibirlos. Todo este escenario, no hizo más que incrementar los problemas por cortes de luz y agua no sólo en la zona céntrica, sino también en los barrios, en donde el crecimiento demográfico desmedido, también genera diariamente todo tipo de problemáticas que van desde los cortes en los servicios hasta inconvenientes con el tránsito, que hace pocos años no ocurrían. Por si estos fuera poco, los vecinos deben padecer a diario la ausencia total de respuestas, que es algo recurrente en las empresas prestadoras de servicios, y que se ha hecho costumbre en el municipio local, en donde si bien instan a los platenses a realizar denuncias ante los cortes de servicios, no se han realizado intimaciones y/o denuncias ante el organismo controladores de la energía eléctrica (OCEBA), o el organismo de control de aguas (OCABA), que dependen del gobierno provincial y que deben justamente contralar que se brinden correctamente los servicios. En fin, en medio de un clima agobiante, producto de las altas temperaturas, La Plata ha quedado envuelta en la inacción, incapacidad política y proyección a largo plazo del gobierno municipal, y la ausencia de inversión y mantenimiento en las prestadoras de servicios que se convirtió en algo recurrente los últimos años en el país.

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