El Concejo Deliberante viene muy tranquilo. A pesar de creer que podría ser un lugar de poder caliente, sobre todo por lo que pasó en La Plata el 2 de abril, el deliberativo está cada vez más expeditivo y con muy poco debate. Pero el jueves, los concejales se tomaron un recreo y se cruzaron algunas palabras. Así Leonardo Rocheteau le decía al oficialismo que a los vecinos de La Plata les cobraban multas por exceso de velocidad, pero nunca les señalaban dónde estaban el radar que los vigilaba. Y mientras seguía argumentando, del lado del bruerismo Fabián Lugli tomó la palabra y empezó a defender la medida. Y entonces Rocheteau le dijo que lo que les cobran “era ilegal”, y Lugli no tuvo mejor idea que responderle diciéndole que en su barrio, a ese tipo de actitudes, “las llamaba apretada”. Parece que el concejal del Frente Amplio Progresista no entendió a lo que se refería Lugli y lo invitó a seguir la aireada conversación afuera. El hecho no pasó a mayores y luego del mini debate, el Concejo siguió tan expeditivo como siempre.
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# entrada de Adryán @ sábado, septiembre 07, 2013
