La Plata, Ciudad Generosa

En el ámbito de la farándula, siempre sobrevoló el rumor de que para “llegar” había que someterse a “favores sexuales” que exigen directores de obras o productores de televisión. Actualmente, la política se ha vuelto totalmente chimentera, y la modalidad de “casting sabana” ya se instaló en muchos edificios públicos
.Días atrás, un caso repercutió fuerte en los pasillos del Municipio de La Plata, pero que quedó dentro de las paredes del mismo. Un medio local  repudiando la actitud de este funcionario local, decidió denunciarlo: una importante figura del bruerismo le solicitó sexo a una muchacha a cambio de trabajo.
Quien estaría implicado en bochornoso acto sería, justamente, uno de los referentes de la Dirección de Políticas de Género.
Fueron varios los que observaron la escena de una joven de 25 años llorando desconsoladamente dentro de la Municipalidad.
“Estoy sin trabajo y este desubicado se quiere aprovechar”, gritaba con el llanto atravesado, apenas se le podía entender.
La muchacha había pautado una entrevista con un funcionario del Municipio, que necesitaba una secretaria. Un conocido de ambos le había hecho el nexo, entendiendo la necesidades mutuas; pero nunca se imaginó la propuesta indecente de este personaje público.
Como broche de oro, el político de la gestión bruerista se habría enfurecido con la negativa de la joven, a quien echó de su despacho con la frase: “Así no vas a llegar a ningún lado, nena”. Si eso no es violencia de género, ¿qué es?

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