lunes, 18 de mayo de 2015

 

el garka no se hace cargo

La viuda de Julio César Carballo, un trabajador contratado por la gestión de Pablo Bruera que murió de manera trágica realizando tareas de albañilería en el Teatro del Lago, relató cómo fue
“abandonada” con sus hijos por el municipio, quien montó una coartada para evitar las responsabilidades penales de la muerte.
Carballo, de 50 años, era teniente 1º de la Policía Bonaerense y falleció el 16 de agosto de 2014 cuando se encontraba realizando tareas de albañilería en el Teatro del Lago, y un pedazo de mampostería lo aplastó de manera trágica.
Si bien el Teatro “Martín Fierro” emplazado en el Bosque platense es administrado por el Instituto Cultural de la provincia de Buenos Aires, a través de un convenio, la Secretaría de Gestión Integral de Residuos y Mantenimiento Urbano, a cargo de Mariano Bruera (hermano del intendente Pablo Bruera) se había hecho cargo de la restauración y puesta en valor del lugar.
Su mujer de toda la vida, con la que Carballo tenían dos hijos menores de edad, relató en diálogo exclusivo con este medio, cómo se enteró de la muerte de su marido, y la actitud indignante que asumieron Mariano Bruera y los funcionarios municipales al negar de manera rotunda, que se encontraba trabajando en relación de dependencia con la Comuna.
“Mi esposo siempre trabajaba de albañil, si bien pertenecía al cuerpo de Caballería desde hacía 25 años, él desde los 12 o 13 años trabajó de albañil, haciendo changas”, recordó la viuda de Carballo, quien por temor a posibles represalias, pidió -acompañada de su abogado Gabriel Cusini– no revelar su nombre.

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