lunes, 23 de mayo de 2011

 

que maravilla la lengua castellana

> Un político, que estaba en plena campaña, llegó a un pueblo del
> interior, se subió sobre un cajón e inició su discurso:
>
> -¡Compatriotas, compañeros, amigos! Nos encontramos aquí convocados,
> reunidos o arrejuntados, para debatir, tratar o discutir un tópico,
> tema o asunto trascendente, importante o de vida o muerte. El tópico,
> tema o asunto que hoy nos convoca, reúne o arrejunta;, es mi
> postulación, aspiración o candidatura al Parlamento de esta, nuestra
> Comunidad.
>
> De pronto una persona del público interrumpe, pide la palabra y le
> pregunta al candidato:
>
> - ¿Por qué utiliza usted tres palabras para decir lo mismo?
>
> - Pues mire, caballero: la primera palabra es para las personas con un
> nivel cultural muy alto, como poetas, escritores, filósofos, etc. La
> segunda es para personas con un nivel cultural medio, como usted y la
> mayoría de los que están aquí hoy. Y la tercer palabra es para las
> personas que tienen un nivel cultural bajo como por ejemplo, ese
> borracho que está allí, tirado en la esquina.
>
> De inmediato, el borracho, se levanta y le dice:
>
> - Postulante, aspirante o candidato... ¡hic! El hecho, circunstancia o
> razón de que me encuentre en un estado etílico, borracho o hasta el
> culo... hic! no implica, significa, o quiere decir, que mi nivel
> cultural sea ínfimo, bajo o jodido… ¡hic!. Y con todo el respeto,
> estima o cariño que usted se merece ¡hic!, puede ir agrupando,
> reuniendo o arrejuntando... ¡hic!, sus bártulos, efectos o
> cachivaches... ¡hic! y encaminarse, dirigirse o irse, derechito a
> perjudicar, molestar o joder a su progenitora, a la autora de sus
> días, o a su puta madre!!!!!

Etiquetas:


Comentarios: Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]





<< Inicio

This page is powered by Blogger. Isn't yours?

Suscribirse a Entradas [Atom]