domingo, 20 de noviembre de 2011

 

festejo la city

La Plata festejó en la calle, como todos los años, su cumpleaños 129. Hubo, se sabe desde hace más de 20 años, recital y fuegos artificiales en Plaza Moreno, esta vez con el ingrediente de la lluvia. Pero también actividades alternativas que llevaron la celebración a algún barrio.
Lo más destacables, por lo novedoso, fueron las performances artísticas realizadas en Ringuelet, sobre la mole gris de cemento que alguna vez fue fabulado como un Showcenter que nunca se concretó. Una mezcla de artistas plásticos, músicos y deportistas desplegaron un variado y atractivo menú de actividades, que incluyeron la participación del célebre Rocambole.

Desde temprano se percibió que la fiesta sería medida. Sin mega eventos que congregaran a las multitudes de otras oportunidades. Pero tampoco hubo plena “democratización” de festejos en los barrios.
Por la mañana, un sencillo acto en el que se izó la bandera nacional, y otro, en el que el intendente Pablo Bruera colocó una ofrenda floral para el fundador Dardo Rocha, en la cripta donde descansan sus restos.
A la tardecita, en Meridiano V, otro de los escenarios de la fiesta, se presentó la opera infantil “Brundibar, un cuento para la esperanza”, con la puesta en escena del tenor y reggisseur Rubén Martínez, y la participación del Coro de Niños del Teatro Argentino y actores de la Comedia de la Provincia.
El Hipódromo aportó un atractivo clásico, el Premio Dardo Rocha. Al final, las explosiones de los fuegos se escucharon en todos los rincones, cerrando una fiesta que quizá sea recargada el año que viene, cuando la ciudad cumpla 130.

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