La Plata, Ciudad Generosa

Dicen que la escuela es el lugar donde se construyen los sueños, las luchas y los desafíos. Y el colegio San Simón de La Plata parece haberse transformado en un claro ejemplo de ello. El establecimiento platense hace dos años que busca hacer realidad su ilusión: construir un ascensor para que dos alumnos discapacitados puedan concurrir a clase.Alejo y Bernabé, de 14 años, padecen una discapacidad muscular, que con el pasar del tiempo se acentuó. Hoy, tras cursar desde el jardín hasta el primer año del colegio secundario, sus piernas no resisten para subir los escalones, y es gracias a sus propios compañeros, que los llevan a upa o a caballito, que logran llegar a las aulas para poder participar de las clases.La realidad parecía llevarlos por delante, pero la noticia no dejó a nadie de brazos cruzados, y fue detonante para que compañeros, profesores, y padres se propusieran alcanzar la utopía de recaudar 70 mil pesos para la instalación de un ascensor.
Desde mediados de 2010, cuando decidieron emprender la lucha, todos entendieron que “cada peso es un paso”, y decidieron comenzar a andar. “Vendimos rifas, hicimos eventos, fiestas; todo a pulmón con la unión de padres y chicos. Pero es mucho lo que nos falta y el tiempo se agota. Ahora estamos esperando un subsidio que tramitamos con la Jefatura de Gabinete provincial. En él está nuestra esperanza.”, explicó Arleo, ex alumna, madre, actual docente e integrante de "Unión Padres de Escuelas" del colegio de 45 entre 1 y 2.El sueño ya está en marcha desde hace rato: “Sí, es un logro colectivo que demuestra la solidaridad, la cooperación y el respeto mutuo”, reflexiona Arleo. Y concluye: “Los invitamos a sumarse”.

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