martes, 31 de julio de 2012

 

odio el odio---lo odio

Se hace bravo convivir el día a día con los demás, cuando el común denominador de los que residimos en esta hermosa tierra es el odio. Sí, señor, como usted está leyendo, EL ODIO, así con mayúscula pa que usted me comprienda, como diría mi amigo el Gaucho Mate Amargo.

El camionero Hugo Moyano odia a Cristina por haberlo marginado de las decisiones del gobierno, encima regatearle algunos cargos en el Estado y en las listas de diputados nacionales, y la morocha odia que el morocho le recuerde que en tiempos de la dictadura, ella con su esposo hacían negocios non sanctos con la gente que perdía sus casas por culpa de la 1.050.
El ex piquetero Luis D´Elía odia a la puta oligarquía, y ésta odia que el gobierno nacional y el niño bien Mauricio Macri le suban los impuestos, debido a que tiene que pasar un día menos en Punta del Este o en la latinoamericanizada Miami, donde confluyen Ricardo “Me la como y qué” Fort y Susana “¿los machos me sacan la guita” Giménez.
Odia Riquelme a Falcioni, quien odia la tintura de mala calidad para el pelo que le vende el peluquero de la vuelta de su casa, y odia el joyero paraguayo haberle prestado las joyas de la abuela a Moria, que tuvo que pasar la noche tras las rejas en el país vecino, luego de un evento donde la pasó “joya”.
Odia Amado “Guitarrita” Boudou cuando los periodistas le preguntan por sus causas judiciales, odia Aníbal Fernández cuando alguien le recuerda que cuando era intendente de Quilmes se escapó en el baúl de un auto para no ir en cana, y odia Charlotte Chantal Caniggia a los pobres, al choripán, a la mortadela, y a los ranchitos al costado de la autopista, pero no odia tanto el champain shower ni el cuarto piso de Tinelli.
El pobre odia vivir muerto de hambre y tener que juntar cartones pa poder comer, y el rico odia que el pobre le invada las calles, con sus carros con caballos y su desenfado a cuestas. Odia el comerciante que le afanen todos los días, y se desquita afanándole a los clientes aprovechándose de la inflación, y echándole la culpa a Moreno de todos los males del país.
También odia Matías Alé estar mucho tiempo con la misma mina, y manda mensajes a todas desaforadamente, pa tratar de meterla a cada rato en un agujero distinto, y después de las dos de la mañana, con dos tragos encima, si es mujer, mejor.
Jorge Milton Capitanich, el gobernador del Chaco, al que en su provincia todos lo llaman “Coqui” cariñosamente, odia que desde la Rosada no le manden fondos para pagar los sueldos, y se odia a sí mismo por haber sido tan obsecuente con el Poder durante todos estos años a cambio de dos pesos con cincuenta.
Odian los nenes hacer los deberes y prefieren Gaturro.com o mirar dibujitos en la tele, odia el marido que la mujer le reviente la tarjeta de crédito/débito en el shopping en un día lo que él gana en un mes, y yo odio haberme levantado temprano para escribir esta sarta de pelotudeces, con este frío de cagarse, cuando podría haber dormido un rato más.

Etiquetas: , , ,


Comentarios: Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]





<< Inicio

This page is powered by Blogger. Isn't yours?

Suscribirse a Entradas [Atom]