La Plata, Ciudad Generosa

Los vecinos de la avenida 31 entre 60 y 61 hace rato que cambiaron el paisaje verde de la rambla por un gran obrador a cielo abierto, por donde pasan cientos de camiones y máquinas viales de enorme porte. El ruido y la mugre son una constante ya que permanentemente descargan tierra, arena, escombros y todo tipo de material que van o vuelven de alguna obra municipal. Pero desde hace unos días le sumaron un nuevo elemento, ya que a la desaparición de las grandes máquinas (deben estar trabajando en otra zona) le agregaron la acumulación de grandes montañas de tierra y escombros, con una presencia que no pasa desapercibida: montañas de adoquines que bien pueden ser de algún sitio histórico de la ciudad y que, evidentemente, no tienen el tratamiento que merecen. Los adoquines, un bien preciado en cualquier lugar del mundo, han sido levantados sistemáticamente en La Plata y reemplazados por el asfalto. Y en algunos casos, directamente han sido tapados por la capa asfáltica, perdiendo la riqueza histórica de esos empedrados. Ahora, quienes pasen por la avenida 31 y 61 verán cómo hay varias montañas de tierra, una de las cuales llama la atención porque se trata de una mezcla con los tradicionales cuadrados de granito, los que no se sabe a ciencia cierta de dónde provienen y si fueron levantados de manera definitiva o se trata de una obra en ejecución.
Y siguiendo con el tema de la inundación, los adoquines permiten entre ellos que el ague sea absorbida por la tierra , o sea el reemplazarlos o taparlos con asfalto hace que el suelo no absorba nadita , vioooo

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