La Plata, Ciudad Generosa

La avenida 122, de punta a punta, se encuentra en pésimas condiciones. Esta arteria corresponde a un tramo de la Ruta provincial N° 11, por la que transitan desde camiones de carga hasta vehículos familiares, motos y bicicletas. Los accidentes no parecen alertar a La Plata, Berisso y Ensenada, los municipios que recorre, ni mucho menos a la Provincia. Las quejas de los vecinos son constantes: “Cruzar la 122 es una odisea, más en las calles que no hay semáforo”, expresó Laura Hakimián, que vive por 72 del lado de Berisso y su familia de La Plata. “Si vivís sobre la avenida, no podes dejar a tus nenes en la calle, cada dos por tres se sube un auto a la vereda”, concluyó. En la 122, a pesar de ser angosta por su tránsito, estacionan autos de ambos márgenes. No hay una rambla divisoria de los carriles, por lo que, en muchas situaciones, algunos conductores intentan sobrepasar a otro auto y el que viene de frente debe realizar maniobras bruscas para esquivarlo. “El pozo más pequeño es un cráter”, reclamó Gerardo Sánchez, que rompió el tren delantero de su Corsa en uno de los baches por 122 y 60, generados por la cantidad de camiones de carga que circulan por allí. Los vecinos que tienen sus casas en frente al bosque protestan cada vez que llueve: “Caen dos gotas y se inunda”. La iluminación es otro problema: la falta de luces en el tramo de 80 a 96, entre otros, sigue preocupando a quienes transitan y viven por la zona. Las quejas existen desde hace años, admitieron los vecinos. Pero las respuestas nunca llegaron: “De vez en cuando intentan arreglarlo con alambres, tapan pozos que vuelven a aparecer a las horas”. Los municipios regionales y el gobierno provincial siguen sin solucionar el tránsito de una avenida muy concurrida por todos los vecinos.

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