La Plata, Ciudad Generosa

El congelamiento de precios que impuso el Gobierno da cada vez más señales de ser incapaz de contener la inflación. Después de febrero y marzo, el costo de vida volvió a pegar un salto en abril y cerró con una suba que oscila entre 1,5 y 1,8 por ciento, de acuerdo con las estimaciones de consultoras privadas. En teoría, los artículos que comercializan los grandes supermercados permanecieron prácticamente sin cambios desde el 1° de febrero, el resto de los bienes y servicios que explican el costo de vida volvieron a cerrar abril, mayo y junio con aumentos, incluyendo los alimentos y bebidas que se venden por fuera de las grandes cadenas y que, por lo tanto, no están bajo la órbita de los controles oficiales. En Necochea, al recorrer uno de los supermercados que adhirió al congelamiento de precios, se pudo observar una permanente variación y faltante de productos de segundas marcas y contemplados en el plan gubernamental. Las góndolas vacías son imágenes cada vez más frecuentes entre los supermercados locales.
La inflación (inexistente para militantes del modelo) encareció la canasta básica de alimentos en un 3,4 por ciento; los principales incrementos en Necochea se registraron en las lentejas (15 por ciento), pan (12,5 por ciento), asado (11,4 por ciento), dulce de leche (9,4 por ciento) y queso fresco (7,9 por ciento). En Necochea surge otro fenomeno preocupante, al tiempo que la canasta de alimentos continua en permanente aumento, al igual que la desocupacion, los cupos de comedores escolares se mantienen igual que el año anterior pero la demanda ha aumentado considerablemente. Recorriendo las escuelas, directivos y docentes manifiestan su preocupacion ya que los niños llegan reclamando un desayuno o almuerzo que en muchos casos es su unica comida diaria y la disponibilidad de alimentos no es suficiente para cubrir la creciente demanda.

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