viernes, 30 de agosto de 2013
hogar judicialmente cerrado
La justicia obligó a cerrar el hogar “Mujeres Adelante” de la Fundación SOTRALI que preside Rosario Rocha, luego de una serie de denuncias impulsadas por la gestión municipal de Pablo Bruera.
La acusación contra la ONG fue realizada por el secretario de Desarrollo Social municipal, Juan Pablo Crusat y el director de Asuntos Jurídicos, Rodrigo Vallejos, ante el Juzgado de Garantías Nº3 de esta ciudad el pasado 14 de marzo.
Crusat aseguró a este medio en dicho momento que “la denuncia se hizo siguiendo el relato de una madre, quien nos contó que uno de sus hijos fue llevado a Bolivia por la directora del lugar, Rosario Rocha, quien la manipuló psicológicamente cuando ella estaba atravesando una crisis muy grave por su separación, y la hizo firmar los papeles para enviar al nene de 3 años fuera del país”.
El funcionario dijo que “a su vez esta misma mujer denunció en enero que en el hogar abusaron de otro de sus hijos de siete años, y ante estos dos hechos el municipio decidió intervenir para darle respaldo jurídico a las denuncias”. Pero la titular del lugar, Rosario Rocha no se quedó atrás y salió a responderle, acusando al municipio y a Crusat de querer hacerle “una cama” para ensuciar su nombre y la reputación del hogar que trabaja desde 1999 atendiendo a víctimas de la violencia de género. “No voy a dejar que digan lo que ellos quieran y no hacer nada. Esta denuncia de la mujer es cierta, ella se fue de acá de un día para el otro, pero yo jamás le robé a su hijo, ella lo golpeaba mucho, por lo que hablé con ella y ambas coincidimos en la necesidad de dejarlo al cuidado de mi hermana por un tiempo, hasta que ella se recuperara”, dijo Rocha a INFOPLATENSE. La titular del albergue de calle 160 y 50 aseguró que “ella directamente jamás se interesó por su hijo, y no quiso ir a buscarlo más. Ahora me encuentro con esta denuncia que realmente no es cierta”. Rocha explicó que “todo esto es una jugada política de Bruera y de Crusat quienes me prometieron el año pasado que nos iban a ayudar con el lugar pero las promesas quedaron en el olvido, y como yo me encadené en señal de protesta en la puerta del Municipio, salen con esta denuncia”. “Todos los que me conocen, los especialistas que trabajan en el hogar como las chicas que ya se han ido me llamaron para darme fuerzas y decirme que no baje los brazos”, agregó Rocha en diálogo con este medio al enterarse de la denuncia del municipio. En el marco de estas acusaciones cruzadas, de acuerdo con el fallo emitido por el Juzgado de Familia Nº 4, a cargo de Silvia Mendilaharzo, la entidad deberá abstenerse de albergar víctimas de la violencia familiar en la casa de 160 y 50. En ese sentido, se informó que las mujeres que allí permanecían y sus hijos deberán ser reubicados y asistidos por las áreas de Desarrollo Social y Derechos Humanos de la municipalidad.
El funcionario dijo que “a su vez esta misma mujer denunció en enero que en el hogar abusaron de otro de sus hijos de siete años, y ante estos dos hechos el municipio decidió intervenir para darle respaldo jurídico a las denuncias”. Pero la titular del lugar, Rosario Rocha no se quedó atrás y salió a responderle, acusando al municipio y a Crusat de querer hacerle “una cama” para ensuciar su nombre y la reputación del hogar que trabaja desde 1999 atendiendo a víctimas de la violencia de género. “No voy a dejar que digan lo que ellos quieran y no hacer nada. Esta denuncia de la mujer es cierta, ella se fue de acá de un día para el otro, pero yo jamás le robé a su hijo, ella lo golpeaba mucho, por lo que hablé con ella y ambas coincidimos en la necesidad de dejarlo al cuidado de mi hermana por un tiempo, hasta que ella se recuperara”, dijo Rocha a INFOPLATENSE. La titular del albergue de calle 160 y 50 aseguró que “ella directamente jamás se interesó por su hijo, y no quiso ir a buscarlo más. Ahora me encuentro con esta denuncia que realmente no es cierta”. Rocha explicó que “todo esto es una jugada política de Bruera y de Crusat quienes me prometieron el año pasado que nos iban a ayudar con el lugar pero las promesas quedaron en el olvido, y como yo me encadené en señal de protesta en la puerta del Municipio, salen con esta denuncia”. “Todos los que me conocen, los especialistas que trabajan en el hogar como las chicas que ya se han ido me llamaron para darme fuerzas y decirme que no baje los brazos”, agregó Rocha en diálogo con este medio al enterarse de la denuncia del municipio. En el marco de estas acusaciones cruzadas, de acuerdo con el fallo emitido por el Juzgado de Familia Nº 4, a cargo de Silvia Mendilaharzo, la entidad deberá abstenerse de albergar víctimas de la violencia familiar en la casa de 160 y 50. En ese sentido, se informó que las mujeres que allí permanecían y sus hijos deberán ser reubicados y asistidos por las áreas de Desarrollo Social y Derechos Humanos de la municipalidad.
Etiquetas: datos de la ciudad
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