domingo, 31 de agosto de 2014
Ovacionaron a Abel Albino en la city
El fundador de CONIN brindó anoche una charla ante cientos de personas en la Facultad de Medicina. Habló de su Mendoza natal, de su familia y de su fundación, que lucha contra la desnutrición infantil en el país y el mundo.
Pese a que afuera hacía frío, en la Facultad de Ciencias Médicas hacía bastante calor. Sentadas en el Aula Magna, en los pasillos y en la entrada había más de 600 personas; además se habilitó el auditorio de otro edificio ubicado en el mismo predio, donde había alrededor de 200 más que siguieron la transmisión a través de una pantalla.
“Lo que hago a veces molesta”, dijo al principio de la charla “Invertir en inteligencia” el doctor mendocino Abel Albino, presidente y fundador de CONIN (Cooperadora de la Nutrición Infantil). Se trata de una ONG que cuenta con 63 centros en el país y 9 en el extranjero.
El pediatra destacó que “Argentina es un país enormemente grande, enormemente rico y peligrosamente despoblado”. Por esa razón, no entiende cómo es posible “que un país que produce alimentos para 400 millones de personas no pueda alimentar a 40”.
Con un tono de voz que cambiaba todo el tiempo, el hombre que se define como “médico de niños desde hace 42 años” habló de cómo abandonó una carrera brillante para fundar CONIN, que al comienzo tuvo que hipotecar su casa y que en la fundación necesitan gente que se comprometa, no que solamente se involucre. Puso el ejemplo del huevo con jamón para decir que la gallina sólo se involucró mientras que el chancho se comprometió.
Así, durante las dos horas que duró la conferencia hizo varios chistes, proyectó una presentación con imágenes de niños en Mendoza y conmovió a la audiencia. No paró de mencionar estadísticas, años y frases del Martín Fierro, Sarmiento, Alberdi, algún Papa y Eva Perón. Tampoco le faltó tiempo para aclarar que “lo que yo hago roza lo político, pero no hago política, al menos la política partidaria”.
Albino hizo un repaso de la historia argentina desde 1853 y exaltó algunas hazañas: la lucha contra el analfabetismo, el antiguo trazado férreo que fue récord en el continente, lo avanzado de la construcción del subte en Buenos Aires o del primer observatorio astronómico del Hemisferio Sur en Córdoba.
—Nos llamaban el asombro del mundo. Les digo que nos siguen llamando el asombro del mundo —bromeó, ante el aplauso cómplice del público.
Luego se puso serio para decir que “la principal riqueza de un país es el capital humano” y que en Europa hay pobreza externa, pero que acá existe “pobreza interna”. Cuando se refirió a la desnutrición infantil, dijo que se trata de la “única debilidad mental que se puede revertir” y que es creada por el hombre.
Con 21 años de experiencia en CONIN, afirmó que “el primer año es la primavera del sistema nervioso central”. Detalló que al nacer el cerebro de un niño pesa 6 monedas de un peso (es decir, 35 gramos) mientras que al año, 150 monedas (poco menos de un kilo), y en la adultez tan sólo alcanza el kilo doscientos.
—¿Saben que hay que hacer para sacar el país adelante? —preguntó. Propuso preservar el cerebro dentro del año, educarlo, poner cloacas, agua corriente y caliente, y luz eléctrica en todos los hogares. “Si hacemos estas cinco cosas, somos potencia en treinta años”.
En este sentido, remarcó que en la Fundación “nosotros tenemos un sueño: queremos ver una gran nación, donde se iguale hacia arriba, no hacia abajo” y que “una gran nación se hace con miles de niños leyendo”. Con estridencia, Abel Albino aseguró que es necesario terminar con la prostitución infantil, el aborto, la desnutrición y la pornografía infantil.
“No se mejora una sociedad con más policías”, subrayó más tarde, sino que “se mejora una sociedad con más amor, con más familia, la única escuela de humanidad que existe”. Por último, agregó que “hay que dejar de pensar en las próximas elecciones y pensar en las próximas generaciones”.
La sede de CONIN La Plata está ubicada en 73 y 152 (Los Hornos), que trabaja por medio de la asociación Nutrir la Vida. Para más información, pueden contactarse a través del Facebook “Conin La Plata (Nutrir La Vida)”, el mail coninlaplata@gmail.com o el teléfono 421-4147.
Pese a que afuera hacía frío, en la Facultad de Ciencias Médicas hacía bastante calor. Sentadas en el Aula Magna, en los pasillos y en la entrada había más de 600 personas; además se habilitó el auditorio de otro edificio ubicado en el mismo predio, donde había alrededor de 200 más que siguieron la transmisión a través de una pantalla.
“Lo que hago a veces molesta”, dijo al principio de la charla “Invertir en inteligencia” el doctor mendocino Abel Albino, presidente y fundador de CONIN (Cooperadora de la Nutrición Infantil). Se trata de una ONG que cuenta con 63 centros en el país y 9 en el extranjero.
El pediatra destacó que “Argentina es un país enormemente grande, enormemente rico y peligrosamente despoblado”. Por esa razón, no entiende cómo es posible “que un país que produce alimentos para 400 millones de personas no pueda alimentar a 40”.
Con un tono de voz que cambiaba todo el tiempo, el hombre que se define como “médico de niños desde hace 42 años” habló de cómo abandonó una carrera brillante para fundar CONIN, que al comienzo tuvo que hipotecar su casa y que en la fundación necesitan gente que se comprometa, no que solamente se involucre. Puso el ejemplo del huevo con jamón para decir que la gallina sólo se involucró mientras que el chancho se comprometió.
Así, durante las dos horas que duró la conferencia hizo varios chistes, proyectó una presentación con imágenes de niños en Mendoza y conmovió a la audiencia. No paró de mencionar estadísticas, años y frases del Martín Fierro, Sarmiento, Alberdi, algún Papa y Eva Perón. Tampoco le faltó tiempo para aclarar que “lo que yo hago roza lo político, pero no hago política, al menos la política partidaria”.
Albino hizo un repaso de la historia argentina desde 1853 y exaltó algunas hazañas: la lucha contra el analfabetismo, el antiguo trazado férreo que fue récord en el continente, lo avanzado de la construcción del subte en Buenos Aires o del primer observatorio astronómico del Hemisferio Sur en Córdoba.
—Nos llamaban el asombro del mundo. Les digo que nos siguen llamando el asombro del mundo —bromeó, ante el aplauso cómplice del público.
Luego se puso serio para decir que “la principal riqueza de un país es el capital humano” y que en Europa hay pobreza externa, pero que acá existe “pobreza interna”. Cuando se refirió a la desnutrición infantil, dijo que se trata de la “única debilidad mental que se puede revertir” y que es creada por el hombre.
Con 21 años de experiencia en CONIN, afirmó que “el primer año es la primavera del sistema nervioso central”. Detalló que al nacer el cerebro de un niño pesa 6 monedas de un peso (es decir, 35 gramos) mientras que al año, 150 monedas (poco menos de un kilo), y en la adultez tan sólo alcanza el kilo doscientos.
—¿Saben que hay que hacer para sacar el país adelante? —preguntó. Propuso preservar el cerebro dentro del año, educarlo, poner cloacas, agua corriente y caliente, y luz eléctrica en todos los hogares. “Si hacemos estas cinco cosas, somos potencia en treinta años”.
En este sentido, remarcó que en la Fundación “nosotros tenemos un sueño: queremos ver una gran nación, donde se iguale hacia arriba, no hacia abajo” y que “una gran nación se hace con miles de niños leyendo”. Con estridencia, Abel Albino aseguró que es necesario terminar con la prostitución infantil, el aborto, la desnutrición y la pornografía infantil.
“No se mejora una sociedad con más policías”, subrayó más tarde, sino que “se mejora una sociedad con más amor, con más familia, la única escuela de humanidad que existe”. Por último, agregó que “hay que dejar de pensar en las próximas elecciones y pensar en las próximas generaciones”.
La sede de CONIN La Plata está ubicada en 73 y 152 (Los Hornos), que trabaja por medio de la asociación Nutrir la Vida. Para más información, pueden contactarse a través del Facebook “Conin La Plata (Nutrir La Vida)”, el mail coninlaplata@gmail.com o el teléfono 421-4147.
Etiquetas: datos de la ciudad
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