La Plata, Ciudad Generosa

Paul McCartney (73) brindó su primer show en La Plata frente a 45 mil personas, luego de tocar en Córdoba el domingo.
El ex Beatle apareció en escena con un largo saco azul, pantalón negro, camisa celeste y botas y se dispuso a tocar el hit A Hard's Day Night.
La segunda canción que interpretó fue Save us del disco New de 2013, y acto seguido saludó a la multitud con un "buenas noches Buenos Aires, buenas noches chicos" para dar paso a Can't buy me love.
El evento comenzó pasadas las 19 junto a la banda El Kuelgue, y DJ Chris, que acompaña a McCartney en la gira.
Quien recuerda los grandes recitales que pasaron por nuestra ciudad, sin dudas, recordará por siempre éste. Lejos de eufemismos y palabras adornadas, Paul McCartney fue único.
A penas pasadas las 21,15 horas, sencillo y sin rodeos Macca salía a escena. Con un traje azul y camisa a tono, el exBeatle llevó a sus fanáticos por un recorrido en el tiempo. Los invitó, incluso, a una “Fiesta”, como bien dijo en un perfecto español en el ida y vuelta afectuoso que tuvo con el público durante las casi tres horas que duró el recital.
Pese a la controversia que se armó en torno al pedido que el mítico músico británico hizo sobre la venta de alimentos compuestos por carne animal y sus derivados, en La Plata se hizo caso omiso.
Dentro del estadio y como en cada evento del Único había panchos y hamburguesas, ninguno de vegetales, claro está. Y en las afueras las parrillas chisporroteaban en los vuelta y vuelta, buenos pedazos de carne, chorizos y hamburguesas.
En el bis y hacia el final una pequeña niña ganaría presencia en el escenario. La joven, llamada Leila, subió junto a su madre y le pidió a Paul tocar el bajo junto a él. Un incrédulo Macca le calzó un bajo y ambos hicieron Get back. "La pequeña argentina", la despidió con una gran sonrisa. La festiva Hi, Hi, Hi , Birthday, Golden Slumbers, Carry That Weight y The End, le darían cierre a una noche mágica.

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